15/12/14

Cien años no es nada



Es una historia muy conocida de los amantes del flamenco. Cuentan del mítico Silverio Franconetti que pasó una temporada en América y que, al volver, no era fácil reconocerle tras las largas barbas y los ropajes de indiano rico.

4/12/14

It`s only flamenco

En 1974 los Rolling Stones publicaron un disco cuyo título se ha convertido en un lugar común del rock y de la música en general: "It's only rock n'roll'. La traducción: es sólo rock and roll.
Toda una declaración de intenciones.
Una de las canciones de este disco lleva el mismo título en su versión extendida: "It's only rock n'roll (but I like it)". Es decir, "Es sólo rock and roll (pero me gusta)".
Y sin ser yo muy rockero, tomo prestado a los Stones este título para hablar del recital de flamenco que el otro día nos ofreció en Logroño Ricardo Fernández del Moral.

29/11/14

'36-39', estreno en La Gota de Leche

Hemos estrenado la nueva versión de nuestro espectáculo '36-39' en el espacio La Gota de Leche del Ayuntamiento de Logroño (institución que lo había becado y que nos ha permitido grabar un DVD del mismo).
Por si no lo sabéis, es una obra que revisa el horror de la Guerra Civil desde el sentimiento flamenco (cante, guitarra y baile).
Aquí os dejamos la grabación. La calidad no es muy buena, pero estamos tan ilusionados que no nos hemos resistido a ofrecerla.

25/11/14

Julia Gay

José Agustín Goytisolo le puso a su hija Julia. A ella le escribió los famosos versos 'Tú no puedes volver atrás / porque la vida ya te empuja / como un aullido interminable'.
Y puede ser que, efectivamente, la vida tenga algo de lobos y empujones mientras se van consumiendo los días.

26/10/14

Menese y el Conde Olinos

Sobre el origen de las letras flamencas, así como del propio flamenco en general, hay mucha mitología. Lugares comunes, afirmaciones categóricas que se han venido repitiendo por ciertos sectores de aficionados sin un análisis crítico. En los últimos tiempos han ido surgiendo estudiosos que nos ofrecen nuevos enfoques y que ponen luz, mostrando lo que realmente escondía la penumbra que cubría los orígenes de este arte.

25/9/14

#microcuento

Ella estaba hambrienta y él quería comer. Era previsible que acabaran en la cama sin probar bocado.


17/9/14

El hombre que miraba al cielo


Para no sentir el dolor
que deja el camino en los pies
y harto de coleccionar
amargos suspiros,
el hombre miraba al cielo.

10/9/14

Aquel olor

Por verano solíamos cargar de kilómetros nuestro Seat-124 camino de Utiel. Viajes interminables vestidos ahora de nostalgia. Al llegar al portal del edificio donde vivía mi abuela, aquel olor. Un olor especial: a verano, a infancia, a ella.
Uno de esos años, subía yo las escaleras tras mi tío y mi padre, estrenando vacaciones.
-¿Lo hueles, verdad?
-Sí.
-Huele a Salud.
Después callaron los dos y subieron las escaleras como dos niños felices al encuentro de su madre. Y yo con ellos. También niño, también feliz, al encuentro de mi abuela.

3/9/14

Mar de sábanas


Deslumbra tu carne
y sigo a tientas,
guía la brújula de los dedos
por un mar de sábanas.

Tumbada eres isla
en un rumbo
de oscuridades;
gimen los acantilados
letanía milenaria.

Altas rocas blandas, tus pechos,
anillos como puertos,
vientre, labios,
gesto, espacio,
dulce noche salada.

18/8/14

Precisamente hoy

Juan Ramírez de Lucas, amor oscuro.
El amor homosexual siempre me resultó lejano, extranjero, incomprensible.
Hasta que leí los Sonetos del Amor Oscuro de Lorca y, muy especialmente, hasta que escuché al Lebrijano cantar uno de esos poemas.
Precisamente hoy, que hace ya demasiados años que mataron al poeta, lo recuerdo.

29/6/14

Adelanto del espectáculo 36-39


Aquí os dejo un adelanto del espectáculo '36-39'. Se trata de una mirada a la Guerra Civil desde el sentir flamenco.

18/6/14

En apenas unos segundos

Hay personajes que a uno se le quedan grabados en la memoria. Personajes que, aunque sepultados entre montoneras de recuerdos, de vez en cuando destellan desde lo profundo. Y se te hacen presentes sin saber muy bien por qué. Me ha ocurrido hoy con Fernando Fernández Pantoja, 'Fernando Terremoto'.
Me he acordado de la única vez que tuve la oportunidad de escucharle en directo. Fue hace unos años y en un sitio en teoría tan poco propicio para el flamenco como es el Museo Guggenheim.
Allí estaba con mi hermano. Y no se me olvidará nunca cómo le dije, nada más escuchar el primer quejío de su primer cante, con la emoción rebotándome en los oídos:
- Con esto ya me doy por servido. Ya podemos irnos.
Pocas veces como entonces, en apenas unos segundos, he podido comprobar tan honestamente eso que se dice de que el cante jondo tiene un eco de siglos.

12/6/14

Avecillas puñeteras


Avecillas volanderas,
pequeñas bestias aladas,
pajarillos alegres,
breves impulsos que cantan...

Animales libres
por los cielos de Villarrobledo...

El cerezo de mi padre habéis pelado,
triperos glotones.
Saber debéis que vuestra hambre
le está tocando los cojones.

3/6/14

Tientos/tangos de Gregorio Martínez



Durante la Guerra Civil, Gregorio Martínez estaba en la Brigada CI, 46 división de ‘el Campesino’. Antes de llegar al Ebro, había sufrido los horrores de Guadalajara, Teruel y Brunete. Era cabo de transmisiones, por lo que llevaba un equipo muy pesado pero, al menos, no se encontraba entre las unidades de choque, donde las bajas eran altísimas.
Los de choque llevaban sólo manta, fusil, granadas y cargadores: lo justo para correr lo mejor posible.
Martínez era hombre sentencioso y observador. Se dio cuenta de que, en las batallas, lo primero que se dejaba de oír y de ver era a los pájaros.
Otra de sus frases más contundentes era la de que, en la calma que precede al ataque, el miedo sabe a metal.

21/5/14

Blanca cera y dulce miel

Antonio Machado escribió un día un poema que contenía esta estrofa:

Anoche cuando dormía
soñé ¡bendita ilusión!
que una colmena tenía
dentro de mi corazón;
y las doradas abejas
iban fabricando en él,
con las amarguras viejas,
blanca cera y dulce miel. 

14/4/14

Un campesino camino del exilio (1939)

Llegada del Sinaia a Veracruz (Méjico).
Ocurrió en el Atlántico, ese ancho pasillo por el que navegaban muchos sueños y bastantes fracasos. El vapor Sinaia cruzaba este océano de valientes a principios de junio de 1939 rumbo a México, cargado de exilio español.
Así llegó al puerto de Veracruz la primera expedición de republicanos que, acogidos por el presidente Lázaro Cárdenas, llegaron a sumar unos 30.000 tras 17 viajes.
Muchos eran intelectuales y su acogida supuso un gran impulso cultural para Méjico. 
En aquel primer crucero, en el Sinaia, había algo más que intelectuales.
Fue el caso de un campesino andaluz que puso al mal tiempo buena cara. En el saco de la tristeza lleva muchos bultos: dos de sus hermanos habían muerto en el frente y también había muerto su madre, consumida por la pena.
Él se creció y, en alpargatas y camino del exilio, dijo (tal y como quedó registrado en el diario de a bordo):
-          ¡A mí que me den un azadón! Lo demás corre por mi cuenta.


COLOMBIANA DEL CAMPESINO EXILIADO

Mañana veremos México
no llores más compañera,
en volver a sonreír
tú vas a ser la primera,
tira tus penas al agua
que las coja quien las quiera.

Dejadme un trozo de tierra
y pa´ la mano un azadón
que de buscar sol y lluvia
ya me iré ocupando yo,
no va a pedir más limosna
un campesino español.

Allí vivo

En un planeta raro,
manojos de tierra dura,
continentes de angustia.

En un país salino,
ciudad del desamparo,
barrio amargo.

En la plaza abandono,
junto a la esquina de la pena...
Casa Esperanza.

Allí vivo.

28/3/14

Dos coplas para Isabel

En su cumpleaños,
unos tangos
y un fandango
para mi madre



En una playa de viento
recogí piedras de acero,
me acordaba de mi mare,
fuente de mis consuelos.

Fatigas tiene el camino,
los pasitos me dan sed.
Buscando voy como un loco
tu agua fresca, Isabel.

Ya no atacan los martillos,
ya los peñascos no abrasan,
se durmieron los cuchillos
y brotó una flor en calma.

Preguntas mi paradero,
que dónde tengo mi casa,
si quieres saber mi sangre...
de Isabel la de Tomasa.


Aunque se cansen las olas,
cuando se agoten los días,
después del fin da la vida,
en el silencio a solas
aún sonará tu risa.

16/3/14

El Sol, por la noche


                                                     Para Ander y Dani
Cuando el Sol deja el día
se queda un poco parado
hasta que se acostumbra
a la falta de cielo.

1/3/14

Paco

Ha muerto Paco de Lucía y han sido innumerables y justísimos los reconocimientos que ha recibido el genio de la guitarra.
Otros lo han dicho mejor que yo y no merece la pena que reitere la beneficiosa revolución que para el flamenco ha supuesto el arte que tenía en los dedos el de Algeciras.
Pero no he podido dejar de pensar en algo estos días.

19/2/14

Llorando estrellas

Fotografía Alitana. Movimiento de las estrellas en el Pico de San Lorenzo.
Fotografía Alitana. Movimiento de las estrellas en el Pico de San Lorenzo.

Al sol le salieron canas
y la tarde se hizo tan ancha
que la luz no llegaba a las esquinas.

El cielo comenzó a contar mentiras
y me dijo que era un pozo humilde
habitado por un chispear de luciérnagas.

Una mujer, cazadora de instantes,
acechaba tras su corazón terrestre
a la noche azul que ardía.

Y allí apareció San Lorenzo.
Llorando estrellas.

29/1/14

Bravura

Una vez, por esas tierras de niebla y piedra, alguien dijo que José Menese no cantaba. Que la voz del de la Puebla de Cazalla era otra cosa, que no era música sino algo parecido a una embestida de toro bravo.
Cuando el cantaor de Logroño me contó esta anécdota, me acordé del poema de Miguel
Y después los he recordado a los dos muchas veces, en los ratos cristalinos de soledad. 
Por eso no hago caso a los que me manchan la voluntad diciéndome que el cante y la poesía no sirven de nada. 
Porque sí sirven. 
Cuando se me agotan la inteligencia, el talento y las fuerzas... me acuerdo de José y de Miguel. Me acuerdo de que queda el corazón.
Y embisto con bravura.

23/1/14

Antes de lo inevitable

Romper el barro de los días,
desterrar el vértigo de las hormigas,
echar al mar la cajita de madera
que guarda los gestos rutinarios,
aguantar el duro momento del miedo.

Salir al aire, a la ferocidad de la mañana,
exponerse a los ojos hambrientos,
soñar con gigantes,
temblar bajo la cascada de luz del mediodía,
saber que todo dolerá.

Levantarse,
abrir los ojos,
mojar las manos en los estanques
donde nadan vuestros corazones.

Y, al fin,
de pie,
sonreír a la muerte como a lo inevitable.